Tal como ocurrió el 1 de febrero, este viernes 1 de marzo podría concretarse una nueva suba en el precios de los combustibles en nuestro país, a partir de una actualización impositiva.
Sucede que el Gobierno nacional avanzará este viernes en el cronograma de descongelamiento previsto para el impuesto a los combustibles líquidos, y, por su incidencia en el precio, podría haber un nuevo aumento en surtidores, algo que ya pasó el 1 de febrero y se repetiría en abril y mayo.
Según las estimaciones previas, el incremento rondará el 4% para la nafta y 3% para el gasoil. Además, si se suma el avance del dólar oficial, la suba podría sumar un 2% adicional.
Esto sumará mayor presión a la inflación, en medio de una sensible caída del consumo en general, y de los combustibles en particular.
El tesorero de la Cámara de Expendedores de Combustible, Pedro Llorvandi, estimó que el traslado en el surtidor solo por el componente impositivo será del 4,4% en la nafta y del 2,7% en el gasoil. «La división del faltante del impuesto a los combustibles se realizó en tres partes: una primera parte se aplicará el 1 de marzo, la segunda el 1 de abril y la tercera el 1 de mayo», comentó Llorvandi en declaraciones a Cadena 3.
EL DESCONGELAMIENTO DEL IMPUESTO A LOS COMBUSTIBLES
A principios de febrero el ministro de Economía de la Nación, Luis Caputo, definió descongelar el Impuesto a los Combustibles Líquidos (ICL) y al Dioxido de Carbono (IDC), ya que se habían mantenido sin cambios durante más de dos años y medio.
Segín Infobae, ambos tributos debían actualizarse en base a la inflación, por lo que se decidió en primera instancia aplicar los aumentos correspondientes a 2021 y 2022 que, sumado al incremento de biocombustibles, arrojó una suba del 6% promedio en YPF, Shell, Axion y Puma Energy.
El Decreto firmado por el titular del Palacio de Hacienda había fijado un cronograma para aplicar las subas pendientes del 2023 para ambos impuestos, el cual fue ratificado por fuentes de la Secretaría de Energía.
Así es que se definió que desde el 1 de marzo se computará la inflación del primer y segundo trimestre del año pasado. En abril se aplicará el tercero y en mayo la variación correspondiente al cuarto trimestre, que serán las de mayor impacto.
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