El presidente Alberto Fernández le pidió al gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, que «no utilice al pueblo» como «banco de prueba de represión y saqueo que determinados sectores políticos pretenden llevar adelante».
En un mensaje que dio desde la Casa Rosada, el mandatario habló sobre la situación de violencia en Jujuy y las denuncias presentadas por los organismos de Derechos Humanos, entre las que se encuentran la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Amnistía Internacional y Human Right Watch.
En este contexto, citó la carta de la ONU, en la que destacó que 20 personas resultaron heridas por los enfrentamientos, «incluidos un joven de 17 años que sufrió un trauma ocular severo, y otra con un trauma craneal».
También, planteó lo que señaló la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) sobre la reforma constitucional, y el no cumplimiento de la consulta a los pueblos originarios, «de acuerdo con los estándares interamericanos e internacional».
«Al respecto el derecho a la consulta y consentimiento libre previo a informado es un principio fundamental que busca garantizar la participación efectiva y significativa de los pueblos indignas en las decisiones que afectan sus derechos, territorios y recursos naturales», indicó Alberto Fernández en su discurso.
Luego, se refirió a las declaraciones de Amnistía Internacional, organización que advirtió que «avanzar con una reforma de estas características conducirá a su inmediata impugnación a sede judicial ya que varias de sus disposiciones contradicen la Constitución Nacional y tratados internacionales de DD.HH., lo que comprometerá la responsabilidad del Estado argentino, ante el sistema internacional de promoción y protección de los DDHH».
«Le pido que cumpla con los estándares internaciones en materia de derechos humanos. No se lo pide este Presidente, es nuestro pueblo quien se lo pide y es el mundo lo que le exigen que se termine la violencia estatal en Jujuy», señaló.